El gabinete israelí acaba de votar confirmar un pacto de cese al fuego con Hamás. Se puede hacer la pregunta “¿Es este un buen acuerdo?” Bueno, ciertamente lo es para Hamás, les garantiza la continuidad de su existencia y los convierte en héroes mediáticos.
Desde una perspectiva yihadista, esto no es un pacto en lo absoluto, sino una hudna, una tegua temporal hasta que la umma (comunidad) musulmana pueda rearmarse y recuperar su fuerza militar.
¿Es este un buen acuerdo para Israel? Por supuesto que no. Es terrible. Pero podría ser la mejor opción que tenemos justo ahora. Tenemos que confiar en que el PM Netanyahu y el gabinete van a sopesar todos los pros y contras, y tomarán la decisión correcta.
La idea de Hamás declarando victoria es bizarra y desapegada de la realidad. Gaza ha sido destruida; la gente está viviendo en escombros; y la infraestructura militar de Hamás ha sido eliminada. ¿Se quieren regocijar sobre eso? Que así sea.
¿Cuáles son las razones para aceptar el cese al fuego desde la perspectiva de Israel? Estos son algunos de los factores:
Rehenes: Queremos que los rehenes vuelvan. No hemos sido capaces de rescatarlos por medio de comandos. Los corazones de nuestra gente están rotos. Ahora, al menos algunos de los rehenes volverán a casa. Muchos otros ya están muertos. Aquellos que quedan en Gaza están en peligro mortal.
Reagrupación de tropas: Nuestras tropas están exhaustas y necesitan reagruparse. Muchas familias mesiánicas (incluyendo las nuestras) tienen hijos en el medio de la lucha. El tipo de guerra de guerrilla que se está librando ahí es muy peligrosa y no produce una victoria real. Un gran número de personas resultaron muertas o heridas esta semana.
Guerra más amplia/larga: Estamos en una nueva etapa de la guerra. Hay posibilidad de ampliar el grupo de aliados, incluyendo la administración de Trump y algunas naciones árabes moderadas. Se está desarrollando una estrategia más inclusiva en toda la región. Este conflicto continuará durante años.
Prioridades de despliegue: Gaza no es el escenario más crítico en este momento. La presencia de Hamás en Judea y Samaria (Cisjordania) es más peligrosa. Los terroristas houthis en Yemen deben de ser detenidos. Y existe la oportunidad de una ofensiva importante contra Irán.
La victoria en Líbano: Asombrosamente en Líbano, algo que nadie hubiera podido soñar hace unos meses: Hezbolá ha sido derrotado y un gobierno cristiano ha tomado el control. Su nuevo presidente, Joseph Aoun, ha prometido retirar todas las armas restantes de Hezbolá.
Cambio sirio: En Siria, un nuevo líder suní tipo ISIS, Ahman Al Sharaa ha tomado el mando. El régimen de Asad había sido apoyado por Rusia e Irán. Tal parece que Rusia ha quedado debilitada por la guerra con Ucrania, e Irán por la guerra con Israel. Esto provocó al cambio repentino.
La influencia de Turquía: La milicia de Al-Sharaa es apoyada por Turquía, que ha recuperado un nuevo nivel de poder en el área. El sueño de Erdogan es restablecer el imperio otomano y conquistar Israel, incluyendo el Monte del Templo. Debemos estar preparados para defender la frontera de Siria. Las FDI han tomado el control de una zona de seguridad estrecha pero muy estratégica a lo largo de esa frontera.
Plan de Irán: Puede haber un plan para atacar las instalaciones de armamento nuclear en Irán. Nadie puede decirlo con certeza. El régimen de los ayatolás ha sido debilitado, y la oposición dentro de Irán está aumentando su fuerza cada día.
Acuerdos Abraham: Tanto Netanyahu como Trump quieren renovar y ampliar los acuerdos Abraham. Esto podría llevar a un periodo de paz y prosperidad en toda la zona, particularmente si Arabia Saudita se une.
Proporcionalidad: ¿Dónde está el mundo clamando “proporcionalidad” ahora? Israel recibe de vuelta 33 rehenes inocentes, mientras libera 1000 sanguinarios terroristas. Una “doble moral” hipócrita se usa siempre contra Israel.
